Parpadea.

Querida Julie:
Si estás leyendo esto, significa que hallé el valor para enviartelo. Así que bueno, bien por mi.
Me conoces muy bien, pero si me permites empezar, sabes que suelo repetir una y otra vez lo duro que me resulta escribir de tí. Y que nunca antes lo había hecho.Pero ésta, Ju. Ésta es la cosa más difícil que he tenido que escribir alguna vez.
No hay un modo fácil de decirlo, así que sólo lo diré.

Conocí a alguien.
Fue un accidente.
Yo no lo buscaba, porque no estaba buscando aventuras.
Fué una tormenta perfecta.
Ella dijo una cosa, yo dije otra.
Y al instante supe que quería pasar el resto de mi vida en mitad de esa conversación.
Ahora tengo este sentimiento en mis entrañas. Porque Ella podría ser la indicada.
Está completamente chiflada de una forma que me hace sonreir, es extremadamente neurótica. Necesita muchísima atención.
Ella eres tú, Julie. Ésa es la buena noticia.
La mala es que no sé como estar contigo en éste momento. Y me asusta muchísimo.
Porque si no estoy contigo ahora, tengo la sensacion de que nos perderemos ahí afuera. Este es un mundo grande y jodidamente malo, lleno de vueltas y matices y basta con parpadear para que desaparezca el Momento, aquel momento que pudo cambiarlo todo.
No sé lo que está pasando con nosotros, y no puedo decirte por qué deberías desperdiciar tu fé en alguien como yo pero, maldición, hueles tan bien. Hueles a hogar, y haces unos pasteles deliciosos.  Éso debe sumar algunos puntos, ¿No crees?.

Llámame.
Aún puedes llamarme algún día.
Infielmente tuyo, Chris.